Los electrodomésticos que utilizamos a diario son responsables de una gran parte de nuestro consumo energético.
Un mayor conocimiento de cuáles son los más "hambrientos" en términos de energía nos permitirá tomar medidas para reducir el consumo y ahorrar en las facturas de electricidad.
Cambios en la Etiqueta de Eficiencia Energética (EEE)
Desde marzo de 2021, un cambio en la EEE ha alterado la forma en que evaluamos la eficiencia de nuestros electrodomésticos. La categorización de A+++, A++ y A+ ha quedado en desuso, optando por una escala más rigurosa que abarca desde la "A" a la "G". Este cambio, lejos de representar un deterioro en los electrodomésticos, refleja un sistema de clasificación más estricto que deja espacio para futuras mejoras.
Los grandes consumidores de energía en el hogar
Examinemos los electrodomésticos que consumen más energía en nuestros hogares:
1. El Frigorífico: un constante consumidor
El frigorífico, siempre conectado, es uno de los electrodomésticos que más energía consume en una vivienda. Según datos de la Red Eléctrica de España, el frigorífico puede llegar a representar hasta un 14% del consumo energético de un hogar.
2. Televisión: el pasatiempo energético
El televisor, aunque no lo parezca, puede llegar a suponer hasta un 10% del consumo energético de una casa. La mejor forma de reducir este gasto es tan simple como apagar completamente el aparato cuando no esté en uso, en lugar de mantenerlo en stand by.
3. Lavadora: el peso del agua caliente
El 80% del consumo energético de la lavadora proviene del calentamiento del agua, por lo que lavar a temperaturas más bajas es una solución efectiva para reducir este gasto.
4. Secadora: alto consumo a secas
La secadora es otra de las grandes consumidoras de energía. Un truco útil para minimizar su consumo es centrifugar la ropa antes de introducirla en la secadora.
5. Horno: Cocción y Consumo
El horno, omnipresente en nuestras cocinas, es uno de los electrodomésticos más voraces en cuanto a consumo de energía. Para economizar, se recomienda apagar completamente el horno antes de que finalice la cocción y aprovechar el calor acumulado.
6. Lavavajillas: un consumo bajo control
Con la creciente presencia de lavavajillas en nuestras cocinas, es crucial controlar su consumo. Gran parte de su consumo energético tiene lugar durante el calentamiento del agua, de modo que utilizar programas ECO, mantener limpios los filtros y un mantenimiento adecuado son medidas efectivas para ahorrar energía.
7. Pequeños electrodomésticos: gran impacto colectivo
El microondas, la cafetera, la aspiradora y la plancha, pese a su baja potencia, generan calor y, por lo tanto, consumen energía. Estos pequeños electrodomésticos pueden llegar a representar hasta el 27% del consumo total de energía de una vivienda.
Estar informado sobre el consumo energético de nuestros electrodomésticos es el primer paso para optimizar nuestro uso de la energía. A través de pequeñas acciones cotidianas y mantenimiento adecuado, podemos minimizar nuestro consumo y, en última instancia, cuidar de nuestro planeta mientras ahorramos en nuestras facturas.